El transporte por carretera exige cada vez más eficiencia, ahorro y sostenibilidad. Por eso, muchos profesionales del sector están apostando en los últimos años por los sistemas Dual Fuel, una tecnología que permite combinar diésel con gas —ya sea GNC (Gas Natural Comprimido) o GLP (Gas Licuado del Petróleo)— para optimizar el rendimiento del motor. ¿No lo conocía y quiere muchos más detalles? No hay problema: en Diésel Inyección Milladoiro, su taller mecánico en Santiago, le hablamos ahora mismo sobre el importante ahorro y aumento de la vida útil que generan concretamente en flotas y furgonetas.
¿En qué consiste el sistema Dual Fuel?
El sistema Dual Fuel permite que un motor diésel funcione con una mezcla controlada de gas y combustible convencional. Mediante una centralita específica (ECU Dual Fuel), el sistema gestiona la cantidad adecuada de gas que se inyecta en el circuito de admisión para optimizar la combustión. De este modo, se reduce la cantidad de diésel consumido sin perder potencia. El resultado es una combustión más limpia, eficiente y económica.
1. Menor consumo y mayor ahorro
Una de las principales ventajas del Dual Fuel es el ahorro de combustible, que puede llegar hasta un 40 % respecto a un motor diésel convencional. Además, disminuye el uso de aditivos como el AdBlue, traduciéndose en un mantenimiento más sencillo y en una amortización rápida de la inversión. Para empresas de transporte o autónomos con flotas, el impacto económico es especialmente notable: menos gasto por kilómetro recorrido y mayor autonomía.
2. Reducción de emisiones contaminantes
Con un motor Dual Fuel se emite un 10 % menos de CO2, hasta un 33 % menos de óxidos de nitrógeno (NOx) y un 95 % menos de partículas en suspensión (PM). Gracias a esta reducción, los vehículos equipados con este sistema pueden obtener la tarjeta ECO de la DGT y así circular sin restricciones en zonas urbanas de bajas emisiones.
3. Mayor eficiencia y potencia del motor
Al mejorar la combustión, se obtiene una eficiencia un 20 % superior y una entrega de potencia más uniforme. Esto se traduce en un motor más suave, con una mejor respuesta en carretera y menor desgaste de componentes internos.
4. Más vida útil y menos mantenimiento
El uso combinado de gas y diésel también reduce la temperatura de combustión y evita la acumulación de residuos en el motor. Este factor prolonga la vida útil de los sistemas postcombustión (FAP, catalizadores, EGR) y mantiene el rendimiento del vehículo durante más tiempo.
Dual Fuel: una inversión rentable para su flota
Si busca mejorar la eficiencia de su flota o reducir costes de combustible, ahora ya sabe que el sistema Dual Fuel es la alternativa más inteligente. Para resolver dudas concretas sobre su flota o sus furgonetas, así como para determinar si es más adecuada la conversión a GNC o a GLP, contacte con nuestro taller mecánico de Santiago y desde Diésel Inyección Milladoiro estudiaremos sus vehículos de forma personalizada.